miércoles, abril 30, 2008

Gracias, Famobil

Este puente me voy a tomar seis días de descanso, ocio, meditación y reflexión. Me hace falta. Dejo Madrid encantado de la vida, pero me quedo con una espinilla clavada: La V Feria del Coleccionismo de Playmobil en España, que se celebrará en mi ciudad el 2, 3 y 4 mayo.

Me jode mucho perderme este acontecimiento. Los Playmobil, aquí llamados Famobil, de los que aun conservo una caja en mi casa de Cantabria, hicieron por mí -y por muchos de mi generación- más que muchos amigos, familiares, profesores, escritores y estrellas de la tele.

En aquellos tiempos infantes o adolescentes, los conceptos de tiempo y espacio no los tenía tan definidos como hoy, no estaban tan claros. Jugabas, imaginabas, armabas, colocabas estratégicamente a tus “clicks” (así los llamábamos) sin pensar en la hora o en el espacio que ocupaban en tu cuarto o más allá de él, en los insondables y misteriosos territorios del pasillo, la cocina, el baño o el salón.

Que ahora recuerde, tuve el castillo, el circo, la caravana familiar, la caravana del Oeste, el coche de policía y la nave especial. Nunca tuve, y ya sabe mi madre que supuso un pequeño trauma infantil, lo que más desee: el galeón pirata, una joya que poseían mis vecinos pero que no sabían disfrutar, porque no tenían, ordinarios, ni mi imaginación, ni mi inmensa paciencia para el detalle.



Los “clicks” eran y son un perfecto baremo para saber si un niño es imaginativo o no, si es un pequeño sociópata o prefiere la calle y las relaciones humanas. Mis vecinos sólo querían colocar con gran velocidad a los “clics” y empezar a jugar. Pim-pam-pum-zas-catacrac-argh y ala, a jugar con el balón al patio.

Yo no fui niño de patio, sino niño de habitación. Lo mejor de los Playmobil era vestirlos, armarlos, colocarlos, amputarlos premeditadamente, pintarlos, dirigir, coreografiar. Y me pasaba horas y horas haciéndolo hasta que era la hora de cenar o de dormir. Les debo mucho a estos bichos.

9 comentarios:

Awake at last dijo...

¿Eres consciente de lo "Kubrick" que suena este post?

XD

Descansa, xiquet.

Mks.

IVAN REGUERA dijo...

Soy consciente. Me sentía Kubrick sin conocerlo.

Buen puente.

Leo dijo...

Yo soy aficionado a los videojuegos desde que, con 10 años, me compraron mi primer Spectrum, así que pronto dejé todo a un lado, excentpo el Scalextric, el ciclismo y, más adelante, las mujeres.

No hay duda: los videojugos son los culpables de que yo sea un sociópata sin imaginación. ¿O fue el colegio el que tuvo la culpa de que yo sea así ;-) ?.

Por otro lado, buena recomendación la que haces. Me la apunto para echarle un ojo, y si vamos sacaré fotos si me dejan.

Y felices vacaciones, neng :-)

IVAN REGUERA dijo...

Leo: ¡Igualmente!

vane dijo...

Yo hacía lo propio con Pin y Pon. :)

Bones vacances!!!

IVAN REGUERA dijo...

Vane: "¡Así son, Pin y Pon, pequeñines!"

Gracias y que tú también las disfrutes.

Anónimo dijo...

Yo los llamaba cli(p)

Leo dijo...

Pues nosotros al final fuimos... pero no pudimos entrar. O no quisimos, por que llegamos allí sobre las 19 horas, y la cola para entrar era tan larga que desistimos y nos fuimos a tomar algo a una terraza junto al lago. La organización cometió un error eligiendo como sede el Pabellón 7, demasiado pequeño para lo que se avecinaba. O no pudieron elegir otro por una cuestión de pelas para alquilarlo, quién sabe, pero para el año que viene habrá que pensar en mudar el evento al Pabellón de Cristal, mucho más adecuada para la masa que, al parecer, allí se junta.

Y curioso el detalle de que las indicaciones de los pasos de cebra del Recinto Ferial no se han modificado en al menos 30 años. ¿Consecuencia?. Que siguen indicando direcciones hacia pabellones que hace años que se derribaron :p. Muy curioso...

Anónimo dijo...

si te gusto el barco pirata de los clicks, puede ser que te guste este video que monte despues de restaurar el mio de pequeño.
http://www.youtube.com/watch?v=EfknesMvV4c